Tenía curiosidad sobre este libro y he escuchado varias entrevistas que ha dado Gaviria al respecto, pero sinceramente no pensaba leerlo hasta que mi hermano lo compró, pasó por las manos de toda mi familia cercana y finalmente llegó hasta mí con las recomendaciones correspondientes.

Creo que es un libro muy interesante para leer en este momento dado que trata sobre el gobierno colombiano actual, las expectativas de cambio que ha generado, su forma de abordarlas desde el poder y los problemas a los que se ha enfrentado hasta ahora. Pero también creo que puede ser un libro interesante para leer en el futuro y en el marco de otros gobiernos, pues quizás resulte ser útil para explicar los resultados de este gobierno y las posibilidades de futuros gobiernos.

En cada capítulo el autor toma conceptos o teorías de la politología, la sociología, la filosofía e incluso la biología y los utiliza como base para analizar y contar hechos ocurridos durante el primer año del gobierno Petro. No es un libro de chismes ni una crítica malintencionada y más que enfocarse en la personalidad del presidente, se revisan sus acciones y decisiones a la luz de las teorías… lo que sí pasa es que es inevitable encontrar rasgos de personalidad en esas acciones y decisiones.

Después de leer el libro y con todos los trinos (ahora X) que ha publicado el presidente, toma más fuerza mi impresión de que se trata de una persona muy buena para los grandes discursos, la crítica, la capacidad de plantear grandes ideas, pero no para lograr que se ejecuten. Alguien que se siente perseguido por cualquiera que manifieste desacuerdo con sus ideas y que parece creer que siendo presidente solo basta con expresar un deseo (o un sueño) para que este se haga realidad, sin tener en cuenta la realidad práctica que al final nos aterriza a todos.

Por último quiero señalar que me pareció muy curioso el hecho de que Gaviria basara su libro en notas que fue tomando mientras presenciaba todo desde el lugar privilegiado de Ministro. Aunque él mismo dice en su libro que «tendemos a sobrestimar la sofisticación estratégica de los otros. Uno trastabilla en la oscuridad y los otros estiman que cada paso ha sido calculado», no puedo evitar pensar que intuía su futuro en el gobierno y se estaba preparando para él.

La estrechez de miras puede llevar más lejos, puede ser más transformadora que una mirada más ambiciosa, que la reiteración de una voluntad sin método.