La lectura de un libro como este implica que el lector tiene algún grado de curiosidad con relación a las vidas ajenas, la gente famosa, el cargo de presidente o el hecho de vivir en medio del lujo. Creo personalmente que si una persona no está interesada en alguno de estos temas, este libro le parecerá vacuo y el tiempo invertido en su lectura le parecerá tiempo perdido.
A mí me gustó. Es la clase de libro que confirma que a pesar de todos los lujos que los rodean y del rango que tienen, el presidente de los Estados Unidos y su familia son personas con necesidades, manías y problemas normales, que podrían parecerse a los de cualquiera de nosotros (la verdadera diferencia radica en los recursos de los que disponen para tratarlos).
Además, el libro cuenta muchos detalles sobre la forma en la que las cosas funcionan en la casa blanca, por ejemplo habla de la logística necesaria para la partida de una familia y la llegada de otra, cuenta un poco sobre las recepciones a personajes ilustres, revive la tensión de momentos críticos como el asesinato de Kennedy o el 9/11, o menciona lo que implica ser un empleado en la casa más famosa del mundo.
Para cerrar les cuento que el libro incluye varias referencias a Downton abbey y al hecho de que los empleados de la casa blanca son como los empleados de la serie, se sienten orgullosos de trabajar allí y valoran a la familia que la ocupa y a sus secretos como si fueran propios.