Desde que un amigo que vió a James Blunt en concierto me dijo que en vivo era un músico aún más increíble de lo que parecía, tenía muchas ganas de ir a uno de sus conciertos. Incluso ingresé a http://www.tulostraes.com/ y lo registré como uno de los artistas que quería ver en concierto en Colombia.

El día que supe que vendría a Bogotá, hice todo lo necesario para conseguir las boletas y asistir…ya se imaginarán que mis expectativas eran altísimas.

Por fin llegó el día del concierto. Llegamos a hacer fila hacia las 7 pm, pues según la boleta el concierto empezaba a las 8. Entramos y encontramos que el teatro y las boletas que teníamos nos permitían estar bastante cerca del escenario, lo cual es genial en los conciertos…sobre todo para mi, pues no soy muy alta.

El concierto fue abierto por The Mills. La verdad es que había escuchado alguna canción de ellos, pero no conocía su trabajo, así que fue interesante escuhcarlos, sin embargo soy de las personas que odia a los teloneros en los conciertos. Si voy a estar de pie más de 2 horas, quiero que sea por el artista al que voy a ver y no por uno que no me interesa. Sé que es muy cruel con los teloneros que están haciendo su trabajo y dando lo mejor de ellos, pero también es cruel con los asistentes que tienen que pasar horas de pie escuchando algo que no necesariamente les interesa.

James Blunt salió hacia las 9 y no puedo ni explicar la emoción que sentí. El concierto fue exactamente como lo esperaba, después de ver diferentes presentaciones del tour en Youtube, lo único que faltó fue el traje de astronauta que utilizó en otros lugares.

El setlist estuvo compuesto en su mayoría por las canciones de su nuevo disco, pero obviamente y teniendo en cuenta que es su primera vez en Colombia, cantó algunos clásicos como You’re beautiful, Goodbye my lover, Carry you home y 1973. Personalmente me hubiera encantado que cantara I reall want you, pero entiendo que no podía cantar todas.

Sus interpretaciones fueron impecables y enamoraba cada vez que se sentaba al piano para tocar una canción. Cuando se sentó a interpretar Goodbye my lover fue espectacular, todo el mundo coreaba la canción y se palpaba la emoción en el ambiente.

Es un gran showman: canta todas las canciones en vivo, durante el show toca el piano, el ukelele y la guitarra y por si fuera poco, hace bromas. Este concierto fue un sueño cumplido y espero verlo nuevamente en una nueva gira.

Les dejo el enlace a uno de sus shows del Moon Landing World Tour: