Un libro que se lee en dos horas, pero requiere un poco más de tiempo para ser digerido.

Lo había leído una vez cuando estaba en el colegio, quizás en quinto de primaria. Realmente no recuerdo cuál fue mi apreciación en ese momento, solo recuerdo que tuve que dibujar fragmentos del libro en mi cuaderno, pero no sé por qué tengo recuerdos de dibujar una cueva… de pronto la casa del zorro.

Es un libro fácil de leer en francés, muy recomendable para los que están aprendiendo, porque el vocabulario es simple, los capítulos son cortos y fáciles de entender en el sentido literal. El sentido figurado ya es otro tema, tanto en francés como en cualquier otro idioma.

Las acuarelas de Antoine de Saint-Exupéry son inolvidables y creo que es uno de los pocos libros en los que todas las personas en el mundo pueden tener la misma idea de los personajes…seguramente sin el dibujo de la oveja en la caja, cada uno se hubiera imaginado su propio modelo de caja. Esas acuarelas son muy poderosas en el libro.

Hay que leerlo y hay que regalárselo a los niños para que lo lean.

Il faut exiger de chacun ce que chacun peut donner, reprit le roi. L’autorité repose d’abord sur la raison. Si tu ordonnes à ton peuple d’aller se jeter à la mer, il fera la révolution. J’ai le droit d’exiger l’obéissance parce que mes ordres sont raisonnables.