Creo que esperaba más de esta novela. Tal vez porque alguna vez leí algo de James Patterson y me gustó, o tal vez porque pensé que la participación de Bill Clinton iba a hacer que el contenido fuera más interesante, pero la verdad es que creo que es el tipo de libro que no está a la altura de la publicidad que recibe.

El presidente ha desaparecido es un thriller en el que el protagonista es el presidente de los Estados Unidos, así que la intriga tiene mucho que ver con la política, con los hilos del poder y con los intereses detrás de ellos, pero el centro no es la política en sí misma, sino una amenaza terrorista relacionada con la liberación de un virus informático que destruiría todos los sistemas que conocemos.

Aunque el tema es interesante, el desarrollo es predecible y contiene muchas explicaciones cuestionables que no me terminaron de convencer sobre el argumento. No lo considero una gran lectura y no lo recomiendo.

He aprendido por las malas que, por muy preparado que estés, ante un depredador, pocas defensas valen. Llega un momento en que no te queda otra que entrar al trapo y contraatacar.