En esta Antología se pueden descubrir poemas «tradicionales», pero también muchos poemas en prosa, que desde mi punto de vista son como microrelatos y resultan aún más interesantes que los poemas.
Como siempre, los poemas muestran los sentimientos del autor con respecto a todo tipo de situaciones. Muchos son de amor, pero por ejemplo hay toda una serie de poemas escritos en honor a su madre después de su muerte.
Me parecieron muy interesantes los poemas recogidos bajo el título de «Adán y Eva», todos en prosa y todos mostrando cómo podría haber sido el descubrimiento del mundo por parte de Adán y Eva: qué se puede sentir al descubrir el mar, los animales, las plantas, la enfermedad, la muerte…
El libro finaliza con una serie de poemas en prosa que retratan su vida privada, sus relaciones familiares, su dolor por la muerte de Rosario Castellanos, su amor por sus hijos. Personalmente me encantaron los que hablaban sobre su hijo «Julito», porque son pura ternura y amor.
Lo recomiendo. A mí me gustó, dejé marcados varios poemas a los que quiero volver y sé que lo volveré a leer completo algún día.