¿Quién no recuerda algún amor de su infancia o su adolescencia con nostalgia?, ¿quién no conserva alguna carta escrita con trazos infantiles y lápices de colores?, ¿quién no piensa que ese es el amor más puro que ha sentido en su vida después del que siente por su familia?
Como mi amada eterna es un libro impregnado de esas sensaciones, de la nostalgia del amor joven, que cree que todo es posible y no entiende de desengaños, de infidelidades o de vida en pareja. Se trata de un libro muy romántico que cuenta la historia de amor de Alejo y Maria José, dos niños que se enamoran y tienen que separarse por las circunstancias de sus vidas, pero mantienen su ilusión mediante cartas y llamadas.
Precisamente lo más destacable del libro para mí son las cartas, que transmiten todos los sentimientos de los personajes en cada momento de su relación. Esta es una novela corta y fácil de leer para revivir amores juveniles y recordar que alguna vez creímos que sin ellos la vida no tenía sentido.