113 páginas de misterio, comedia y diálogos improbables con el estilo satírico de Amélie Nothomb.

El conde Neville se dispone a ofrecer una de sus famosas fiestas, todo está preparado hasta que una vidente predice que durante esa fiesta va a matar a uno de sus invitados. Cualquier persona «normal» y sensata probablemente ignoraría la predicción o cancelaría la fiesta, pero el conde no puede dejar de pensar en ello y tampoco puede cancelar el evento social porque ¿qué diría la sociedad?, sería una deshonra para él y para sus antepasados.

La contraparte del conde en esta corta novela es Sérieuse, su hija, una adolescente triste que por hber crecido en ese ambiente comprende a su padre y sostiene con él conversaciones absolutamente irracionales (e hilarantes) sobre el invitado que tendrá que ser asesinado. Detrás de su tristeza se adivina además una historia oculta que podría ser un ingrediente adicional en el asesinato del invitado.

El crimen del conde Neville tiene un argumento simple pero muy sugerente. Y es divertido desde la primera hasta la última página.

¿Por qué inventar el infierno cuando existe el insomnio?